Entre Monjes y Niebla 5y6s5m

Oye, oye, ha llegado el momento de la sección con datos inútiles pero que te harán el centro de atención, o bien, el bicho raro al que todos huyen. Como sea, estos datos no los sabías y ahora solo tú decides qué hacer con ellos.

¿Sabías qué? ¿Sabías qué? Es hora de nuestra sección favorita, el ¿Sabías qué? En esta ocasión te traigo algo muy especial desde las afueras de la Ciudad de México.

Hoy hablaré del desierto de los leones y su ex convento. ¿Sabías que este lugar fue fundado por frailes franciscanos en el siglo XVII? Y lo que más me encanta pensar es que a pesar de su nombre no tiene nada que ver con el desierto real.

La realidad es que es el desierto de los leones pero pues ni es desierto ni hay leones, pero tiene un encanto único.

Te voy a dar una serie de curiosidades para que te escapes y agarres tu coche y lo que sea y te escapes que está no más de una hora, una hora veinte y vayas, visites, te quedas por allá, comas y tengas una tarde recorriendo lo que fue el primer parque nacional declarado en México por Venustiano Carranza ya hace algunos ayeres.

El convento del desierto de los leones se construyó en un entorno montañoso y arbolado, lo que lo convierte en un oasis de paz, alejado del bullicio de la ciudad y su nombre, desierto de los leones, proviene de los leones de la heráldica franciscana, no de leones reales, así que no te preocupes por encontrarte con animales salvajes por aquí.

El convento fue un lugar de retiro para los monjes, quienes llevaban una vida austera, alejada de la sociedad, lo interesante de este lugar es que su arquitectura colonial y el ambiente sereno la rodea y hace un silencio sepulcral.

Si quieres esa onda de la austeridad de los frailes franciscana y esas cosas que decía ya saben quién, pues váyanse aquí y vean si realmente es lo que estamos viviendo.

Puedes recorrer los claustros, irar el jardín central y sentirte parte de la historia, como si el tiempo en el convento aún estuviera ahí detenido, como una cápsula.

Pero espera, aquí viene lo curioso, en el desierto de los leones no solo se respiraba paz sino que también hubo momentos de tensión, durante la guerra de la independencia el convento fue tomado por los insurgentes y más tarde en el siglo XIX sufrió daños, no obstante se conserva en muy buen estado y es un lugar perfecto para hacer una caminata tranquila, rodeo de naturaleza y paz profunda.

Si te gustan los lugares llenos de historia y misterio, el desierto de los leones es el destino ideal y hace parecer una excursión de un día, disfrutar de su arquitectura o simplemente perderte entre sus senderos rodeados de bosque.

Este convento sigue siendo un lugar lleno de magia.