La Hora de la Aguja - Programa 460: Hablemos de Pub Rock (1ª Parte) 235r19

La Hora de la Aguja, con Antonio Hernando Bienvenidos una semana más a la Hora de la Aguja. Aquí seguimos, servidores, Antonio Hernando, quien ya les da la bienvenida para otra hora de buena, buenísima música. Y lo prometido es deuda, aquí el primero de los dos extensos especiales sobre pop rock, un estilo que ya nos apasionaba, pero en el que nos hemos adentrado más en profundidad gracias al libro de Javier Abad llamado Música y Cerveza, publicado en 2002 y descatalogado, pero aún se puede encontrar por ahí. Y yo creo que si sigue esta fiebre, este revival por el pop rock de nuevo, pues seguro que nos encontramos una segunda edición de esta auténtica biblia del pop rock. Porque parece que sí, que hay algo de nuevo interés renovado por este género, o más que género, escena, como ahora comentaremos.

Y es que valga de ejemplo también la portada de la revista inglesa Record Collector de este mes, con Dr. Feelgood en la portada y un extensísimo artículo sobre el pop rock, que como decíamos, más que estilo en sí, pues era una escena, una corriente, un fenómeno que impulsó que los grupos de Londres, o Londres y alrededores, volvieran a los pubs a la cercanía de esos sitios de encuentro en donde se ponían unos tablones en una esquina a modo de escenario, o a veces ni eso, y la banda se ponía a tocar mientras la cerveza corría por las gargantas de esos espectadores que presenciaban canciones directas, sencillas y divertidas, y ojo, de una gran calidad, de unos grupos que primero tenían que tocar ahí por mera supervivencia y también como reacción a ese rock progresivo imperante en la época, o de los llamados grandes dinosaurios, esos Led Zeppelin o Pink Floyd de grandes estadios.

Hablamos de esos inicios de los 70 y un fenómeno crucial para la futura llegada del punk o el new age, esa nueva ola, ya que la línea, como veremos, es tan fina que muchos de esos primeros grupos punk ya se curtiron en los pubs londinenses. Un estilo, este pub-rock, con la mirada siempre puesta en su vecina Norteamérica, ya sabéis que los ingleses son los mejores revitalizando esos sonidos americanos, ya pasó con los Beatles dándole su toque al rock and roll de Chuck Berry o Little Richard, o el blues británico, con esos Clapton, John Mayer y compañía tocando el blues de Muddy Waters bajo su filtro.

Esto pasó aquí también al filtrar por las melodías inglesas, esa americana country, rock y blues americano en los pubs ingleses y, como decíamos, una escena o un estilo corriente o como queráis, quizá denostado y siempre a la sombra del punk y otros estilos de la época. Quizá por eso mismo, por esa falta de ambición y a la vez autenticidad de todos estos músicos que querían devolver la música al pueblo y que no iban con maquillaje ni plataformas ni sombreritos, sino con una camisa de franela y una guinés bien caliente en la mano. Sí, amigos y amigas, se vienen por delante dos extensos especiales de una de las mejores cosas que he visto en mi vida.