Voces del Misterio: Críptidos y animales imposibles, con Jesús Callejo y Carlos Canales hes

Experiencias paranormales, enigmas históricos, conspiraciones, leyendas urbanas, el mito de los ovnis y muchos otros misterios que perduran con el paso del tiempo forman parte de las Voces del Misterio.

¿Crees que estás solo? Siempre hay alguien al otro lado.

Voces del Misterio.

Vamos a poner en marcha los motores.

Queríamos hacerlo como a tres bandas.

Una de esas bandas, gracias a Murphy, no va a poder ser.

Le daré dos o tres vídeos, imágenes.

Lo que era lo importante es que tuvierais conocimiento de ellos.

Y las otras van a ser imágenes.

Y si hay suerte, y al final vamos a tocar madera, pondremos algunos de esos sonidos escalofriantes que ponen los pelos como escarpes, que yo creo que también nos viene bien, para que nos demos cuenta que verlos nosotros no se ven, pero algunos sí que se escuchan.

Y queríamos empezar con esto.

Lo más falso es que un euro de corcho, que es una expresión que me gusta a mí utilizar con frecuencia, porque cuando se habla de criptología, lo que nos encontramos es con muchísima bazofia.

Con muchísima fanserat de gente que quiere colocar algo en Internet, alguna fotografía, algún vídeo, y a ver si cuela, ¿no? A ver si se convierte en una leyenda obana, pero muchas veces es imposible porque se nota la lengua, que es lo que es más falso que un euro de corcho.

Como este noticario del mundo donde, si os fijáis, la cara de chiquito de la calzada en un jabón.

Porque lo demás me lo creo, pero eso me ha costado trabajo itirlo.

Porque si es que los robos se hicieron a mujeres.

Bueno, y a este niño murciélago solo hay que darle para saber que es real.

Bueno, pues vamos a tocar unos cuantos casos.

Bueno, el caso Rondar, más monstruoso imposible.

Así que vamos a ver, muy de pasada, por esa trilogía que queremos montar, aparte de lo que os he dicho, una serie de casos que, desde nuestro punto de vista, son totalmente falsos, que si algún día los encontráis por Internet, rechazadlos, porque no tienen más credibilidad que aquello que le queramos dar nosotros.

Y empezaríamos por este, por el monstruo de Puerto Rico, que, como veis, es muy habitual colocar este tipo de efectos, en este caso, se encuentra en una base militar en Puerto Rico, y considera, pues eso, que es un tipo de animal, teatrológico, ya sabéis que es una especie de malformación genética, y que todo lo cola por ahí.

Como un poco pasó hace unos cuantos años con el gnomo de Girona.

¿Os acordáis que estaba metido en un frasquito de descafé, ahí con formón, y que nos lo hicieron pasar como el gnomo español, no? Al final, pues era tan falso, falsete, falsario.

Pues este tipo de cosas son muy habituales encontrar como la siguiente, que, ahí le tenéis al pobrecillo, el vagón, o lo que sea, por supuesto, que en principio no tiene mayor credibilidad que la apariencia de un homínido, en principio no catalogado por la ciencia, pero que quieren que aparezcan con cierta frecuencia, ya digo, sobre todo por Internet.

Este sí tiene como más historia, es el famoso ganadiábolo, o el pediablo, ganadiábolo se le llamaba así porque fue un pescador de Puerto Rico, Alfredo García Garamendi, y Garamendi es el que intentó colocar este tipo de peces como si fuera una especie desconocida que estaba en las profundidades marinas.

Y a partir de ahí se le empieza a llamar el ganadiábolo.

Yo tengo uno dentro de mi museo de rarezas, porque en mi casa tengo, aparte de libros, revistas y manuscritos de libros más raros, tengo el pequeño museo de rarezas, ¿no? Tengo hasta una pirámide rica.

Auténticamente falsa, pero que es verdadera.

Tengo verdadera porque es directamente del museo de Javier Cabrera de Arkea y bueno, qué pena que ese museo en principio ya no exista.

Bueno, pues dentro de las rarezas, así como Carlos colecciona cosas relacionadas con informática, porque una colección de peces, bueno, de peces no, porque los peces ya son antiguos, de Macs, de todas las clases de categoría.

Bueno, pues yo tengo cosas raras.

Yo tengo uno de estos.

Uno de estos hombrecitos que los hacían en su momento diseccionando una raya y perrayar y convirtiéndolo en esta facha que estáis viendo ahora.

Pero que mucha gente se lo creyó en su momento.

Pensaban que formaba parte de una especie de fósil de alguna civilización tipo Lovercraft que está en los abismos esperando el mejor momento para invadir la superficie y mandarlos a los otros peces a recargar.

Perdón, lo mejor era lo que decían que eran extraterrestres y lo justificaban.

Hay páginas y páginas de internet, en serio, ¿eh? Sí, sí.

Y las partes que eran extraterrestres, sobre todo, por la caída de ojos que tienen.

¿Qué vamos a decir de estas hermosas sirenas? Siempre ha habido gente de buena fe, como Barnum, el director del circo Barnum, que, solo por la buena fe,