Los récords de Etxeberria que borraron Barrenetxea y Oskitz 4dhj

¡Bienvenidos a Corazón Churriurdí, un podcast en el que escucharéis historias sobre la historia de la Real Sociedad! Soy Juan Rodríguez Villán. ¡Arrancamos! Hay nombres en la historia de cualquier club que todos los aficionados querrían borrar.

Si hablamos de tiempos modernos, lo más probable es que los seguidores de la Real Sociedad preguntados por esta cuestión citaran un nombre muy concreto, el de Joseba Echeverría.

Estos jugadores han contribuido enormemente a borrar, si no el recuerdo de quien después se convirtió en leyenda del Atlético, sí al menos su nombre de los libros de historia de la Real.

Echeverría, nacido en el Goibar, se incorporó a la estructura de la Real en 1990 y debutó con el primer equipo chururdín en enero de 1995, con apenas 17 años.

El primero de los dos goles que le hizo al Sporting de Gijón, el 4 de junio de 1995, en la penúltima jornada de la Liga 1995-96 y tras saltar al campo por la lesión de Mejo Codro, hizo de él el goleador más joven de la historia de la Real. Tenía en ese momento 17 años, 8 meses y 28 días.

Lo curioso es que Echeverría también se había convertido en el goleador más joven de la historia del Sanse.

Esa marca la logró siendo el autor del único gol del filial en el 1-4 ante el Casetas en la tercera jornada de esa misma temporada.

Era el tercer partido del jugador con el Sanse y sólo habían pasado 14 días desde que había cumplido los 17 años.

Echeverría provocó todo un terremoto en el fútbol vasco al aceptar la oferta que le hizo el Atletic al finalizar la temporada de su debut en primera.

El jugador, llamado a ser el sucesor de Codro, fichado por el FC Barcelona, dejaba el equipo de su formación para cruzar la A8.

El Atletic abonó los 550 millones de pesetas de su cláusula de rescisión y a partir de ahí fue el villano de la historia para una afición chilurdín que se sintió lógicamente traicionada.

Los dos récords mencionados, habitualmente motivo de alegría en un equipo que tanto orgullo siente por su cantera, fueron más bien enterrados en el olvido para no tener que repetir el nombre de un jugador que ya no representaba en nada a la Real, pero se mantuvieron vigentes unos cuantos años.

El de ser el máximo goleador del primer equipo, nada menos que 24 años, hasta la irrupción en la élite de Ander Barrenechea.

La suya fue una aparición muy temprana, hasta el punto de que se convirtió en el primer futbolista nacido en el siglo XXI en jugar un partido de primera división.

Barrene nació el 27 de diciembre de 2001 y su aparición en la máxima categoría tuvo lugar el 21 de diciembre de 2018, cuando tenía 16 años, 11 meses y 22 días y estaba ya muy cerca de cumplir los 17 años.

Así, el garitano le hizo debutar en su último partido en el banquillo Chirurdín, la 17ª jornada de la temporada 2018-2019, una triste derrota en Anoeta contra el Deportivo Alavés en la que jugó los cinco últimos minutos del encuentro.

Ya con Imanol Alguacil como entrenador del primer equipo, jugó minutos en ocho partidos más de esa misma temporada.

En el segundo de ellos fue titular por primera vez, en otro derbi en Anoeta ante el Eibar.

Y en su octavo partido en la élite, Barrenechea consiguió borrar el récord de Echeverría.

El 12 de mayo de 2019 consiguió el 3-1 definitivo ante el Real Madrid, de nuevo en el estadio Donostiara.

Ese gol, el primero que hacía con la Real, lo anotó teniendo 17 años, 4 meses y 13 días, batiendo en 4 meses y medio la marca de Echeverría.

Pero es que Barrenechea también adelantó a Echeverría en la lista de goleadores más jóvenes de la historia del Sanse.

Aitor Zulaika, entonces técnico del filial, le dio la alternativa al joven atacante realista pocos días después de que Garitano se la diera en el primer equipo.

No hay que olvidar que Barrene tenía edad juvenil entonces.

Pero el 6 de enero de 2019, el chaval debutó con el filial, siendo titular en la victoria por 3-0 ante Lizarra.

Y Barrene fue el autor del primero de los goles de un Sanse, en el que también jugaron Amner Guevara, John Guridi o Roberto López.

Ese gol lo marcó Barrenechea cuando había pasado solo una semana desde que hizo los 17 años, tres días antes de que Echeverría marcara su primer gol con el Sanse.

Todo un regalo de reyes y de cumpleaños para él y para la familia chururrina.

Sin embargo, ahí la marca de Echeverría duró algo menos que la que se refiere al primer equipo.

Este dejó de ser el goleador más joven de la historia del Sanse el 5 de enero de 2003, cuando Oskids Estefanía marcó el primer gol del filial, entrenado entonces por Gonzalo Arconada, en su victoria ante la Arenas por 0-3 en la 18ª jornada de la temporada 2002-2003.

Oskids contaba entonces con 16 años, dos meses y 21 días.

Barrene, con su gol de 2019, se colocó segundo en esa clasificación.

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